Una carta escrita el 30 de abril de 2025

en El Salvador
.

--- **Querida Yo del Futuro,** Hoy te escribo desde una etapa intensa, llena de emociones y cambios. Apenas tengo 18 años. Me fui de casa no hace mucho, y aunque tomé esta decisión con valentía, hay días en que el corazón se me arruga de tanto extrañar a mi familia. A veces me despierto con ganas de abrazarlos, de escuchar sus voces sin una pantalla de por medio. Pero también sé que este paso era necesario para crecer. Trabajo como mesera, algo que nunca imaginé que haría, pero aquí estoy: corriendo entre mesas, aprendiendo a sonreír aunque esté cansada, escuchando las historias de desconocidos, y agradeciendo cada moneda que me gano. No es fácil, pero me enseña cosas que ningún libro podría. Tengo un novio que me ama mucho, y eso me sostiene. Él ha sido luz en medio de muchos días grises, y aunque todavía estamos aprendiendo juntos, su amor me da fuerza y consuelo. Espero que tú, donde sea que estés ahora, sigas recordando cuánto vales y que nunca aceptes menos de lo que mereces. Me pregunto si ya alcanzaste algunas de las metas que hoy apenas están naciendo en mi mente. Si sigues siendo tan soñadora, tan testaruda, tan sensible. Ojalá que sí. Y si no, si te perdiste un poco por el camino, está bien… vuelve a ti, vuelve a esta versión tuya que, aunque asustada, decidió avanzar. No olvides por qué comenzamos. Por nuestra libertad, por el deseo de ser algo más, por esa corazonada que decía: “ve, aunque tiemble todo”. Con todo mi amor, Tu Yo de 18 ---



By YoDelFuturo ®

Haz click aqui para escribirte mas cartas.







Una carta del 30 de abril de 2025

en El Salvador
.

--- **Querida Yo del Futuro,** Hoy te escribo desde una etapa intensa, llena de emociones y cambios. Apenas tengo 18 años. Me fui de casa no hace mucho, y aunque tomé esta decisión con valentía, hay días en que el corazón se me arruga de tanto extrañar a mi familia. A veces me despierto con ganas de abrazarlos, de escuchar sus voces sin una pantalla de por medio. Pero también sé que este paso era necesario para crecer. Trabajo como mesera, algo que nunca imaginé que haría, pero aquí estoy: corriendo entre mesas, aprendiendo a sonreír aunque esté cansada, escuchando las historias de desconocidos, y agradeciendo cada moneda que me gano. No es fácil, pero me enseña cosas que ningún libro podría. Tengo un novio que me ama mucho, y eso me sostiene. Él ha sido luz en medio de muchos días grises, y aunque todavía estamos aprendiendo juntos, su amor me da fuerza y consuelo. Espero que tú, donde sea que estés ahora, sigas recordando cuánto vales y que nunca aceptes menos de lo que mereces. Me pregunto si ya alcanzaste algunas de las metas que hoy apenas están naciendo en mi mente. Si sigues siendo tan soñadora, tan testaruda, tan sensible. Ojalá que sí. Y si no, si te perdiste un poco por el camino, está bien… vuelve a ti, vuelve a esta versión tuya que, aunque asustada, decidió avanzar. No olvides por qué comenzamos. Por nuestra libertad, por el deseo de ser algo más, por esa corazonada que decía: “ve, aunque tiemble todo”. Con todo mi amor, Tu Yo de 18 ---



By YoDelFuturo ®

Haz click aqui para escribirte mas cartas.