Querido Yo del Futuro, si te hubiesen preguntado: ¿Qué quieres ser de grande? Y hubieses respondido: ¡Quiero ser docente! Te habrían etiquetado de iluso, ingenuo y loco; pues, con las habilidades (sean deportivas para ser un atleta, o digitales para la creación de contenidos) y conocimientos que tienes (sean religiosos para ser sacerdote, o luchísticos para hablar de la WWE en la creación de un Podcast), decidiste la vocación más difícil: la educación, y aún así, lograste inspirar a muchos de tus estudiantes y colegas a que aún se puede aspirar a lo humano en medio de un mundo que abraza cada vez más la inmediatez de conseguir todo.
By YoDelFuturo ®
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Querido Yo del Futuro, si te hubiesen preguntado: ¿Qué quieres ser de grande? Y hubieses respondido: ¡Quiero ser docente! Te habrían etiquetado de iluso, ingenuo y loco; pues, con las habilidades (sean deportivas para ser un atleta, o digitales para la creación de contenidos) y conocimientos que tienes (sean religiosos para ser sacerdote, o luchísticos para hablar de la WWE en la creación de un Podcast), decidiste la vocación más difícil: la educación, y aún así, lograste inspirar a muchos de tus estudiantes y colegas a que aún se puede aspirar a lo humano en medio de un mundo que abraza cada vez más la inmediatez de conseguir todo.
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